En Cuba: Retos de la agricultura ante la Tarea Ordenamiento

En Cuba el Estado no ha enajenado la propiedad de la tierra y cuando se da en usufructo, el Estado sigue siendo el dueño, expresó Marino Murillo Jorge, jefe de la Comisión de Implementación y Desarrollo de los Lineamientos, al reflexionar recientemente sobre la aplicación de la Tarea Ordenamiento en el sector agropecuario del país.

Recordó que la Mayor de las Antillas cuenta con 6,3 millones de hectáreas de tierra cultivables, de las que aproximadamente el 80 % es de propiedad estatal y el resto pertenece a los campesinos individuales, propietarios de tierra. «De ese 80 % de propiedad estatal, más o menos el 70 % es gestionado por formas no estatales».

De ahí el concepto definido en los documentos del Partido y en la conceptualización del modelo cubano, sobre la diferencia entre la propiedad como propiedad y la propiedad como gestión, apuntó. «En Cuba el Estado no ha enajenado la propiedad de la tierra».

Aclaró que, si el Estado perdiera la propiedad de las tierras y en vez de entregarlas en usufructo las vendiera, los productores de mayores ingresos terminarían comprando las pertenecientes a los productores de menores ingresos y se iría produciendo gradualmente un proceso de concentración, no de la producción, sino de la propiedad, e iríamos al latifundio, de ahí que en Cuba cuando se dan las tierras en usufructo, el Estado sigue siendo el dueño.

Sabemos que ocurren indisciplinas, dijo, y que hay personas que tienen tierras en usufructo y no las trabajan y en la práctica eso es ilegal.

«Cualquier cosa que se vaya a hablar de la agricultura en la Tarea Ordenamiento  pasa: primero, por los precios de acopio, cómo vas a pagar la producción a esa base productiva; y segundo, a esa base productiva le vendes productos y le prestas servicios. El otro enfoque es cuánto me va a costar lo que me vas a vender como productor.

«En los últimos años, se ha venido produciendo en la economía cubana un fenómeno, en el que hemos hecho incrementos de precios para estimular a la base productiva. Pero, también ha

habido un déficit de insumos, fertilizantes, productos químicos», puntualizó.

Explicó que la economía cubana funcionaba en dos circuitos, uno mayorista de 1×1 y uno minorista de 24×1. «En la agricultura ocurre una cosa interesante: no es verdad que los precios de acopio actuales tienen implícito un tipo de cambio de 1×1, porque como se han venido haciendo incrementos de precios para estimular a los productores, ya el precio actual no expresa un cambio de 1×1».

«Igualmente, hace unos años, en el caso de la agricultura, subimos los insumos importados multiplicados por tres y no era en los dos sentidos. Entonces, muchos productos de la agricultura, por esos precios de acopio para estimular a los productores, no están expresando un ambiente de 1×1».

Murillo Jorge manifestó que el problema no es solo subir precios, sino que hay también temas organizativos y de insumos que hay que revisar. «Qué le estamos diciendo a los productores agropecuarios, que no es posible, sobre estos tipos de cambio, poner ahora un precio que conlleve una devaluación de 24. Vamos a revisar todo lo que sea necesario revisar. Evidentemente, el punto de partida ya no es 1×1, ya no es 1×24», aclaró.

Tenemos que entender que en la economía todo se va integrando y hay que verlo desde esa perspectiva, aseveró.

Insistió el directivo en que, con respecto a la economía, todo se va encadenando, no se pueden ver de forma aislada los procesos que se dan en ella.  

Dijo que en la agricultura se quedaron centralizados 30 productos, y de ellos ocho tienen que ver con el tabaco, en el que hay un proceso de cadena entre la agricultura, la industria y la exportación. «En la práctica, el país se ha quedado con 22 productos centralizados. Esto quiere decir que esos precios los fija el Ministerio de Finanzas o el Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros», recordó.

Por otra parte, consideró que si el producto es exportable, se debe tener cuidado para que el efecto positivo de devaluar y multiplicar el dólar por 24, en lo fundamental le llegue al productor. Eso es un tema que está diseñado cómo se va a hacer. Se trata de cuidar a nuestros productores, aclaró.

Entre los productos centralizados se encuentran el mango, la guayaba y la frutabomba, pues tienen vínculo directo con la producción de compota para los menores. Por lo tanto, deben tener precios que estimulen al productor y a la industria a producir compotas con la producción nacional y reducir las importaciones. Sin embargo, la yuca ya ha quedado descentralizada, añadió.

Enfatizó en que los precios de los productos que no están centralizados, los forman las empresas de la agricultura que le compran los productos a la base productiva en coordinación con las autoridades territoriales.

En el caso provincial, se busca tener una visión ordenada de lo que ocurre en cada municipio, de acuerdo con sus características, continuó. «No podemos pensar tener a Cuba estandarizada desde arriba hasta abajo», manifestó Murillo Jorge.  

Con respecto a los precios, indicó que el Estado está en condiciones de revisarlos con las bases productivas y hacer ajustes, pero no existe más fondo, ya que varios productos permanecen subsidiados, como es el caso de la leche.

Además, pidió confianza a los productores. «Los precios van a ser justos en este entorno social en que vivimos, no pueden ser individuales», reiteró.

VARIAS ADECUACIONES TRIBUTARIAS:

  • Reconocer un mínimo exento anual a la hora de pagar impuestos de 39 120 pesos.
  • Reconocer como deducible el 100 % de los gastos, a justificar el 80 % de estos, lo que demuestra que baja la carga tributaria.
  • Aplicación del 5 % en el impuesto sobre ingresos personales, donde no se aplica escala progresiva, mientras que el resto de las formas no estatales sí la mantienen.
  • Impuestos sobre ventas: se mantiene el 5 %, por la comercialización de las minindustrias.
  • Beneficios en el pago de los impuestos sobre utilidades e ingresos personales derivado de las exportaciones.
  • Facultades a los gobiernos para bonificaciones fiscales, a partir de concertar acuerdos.

LOS RETOS DE LA AGRICULTURA EN EL NUEVO ESCENARIO

Sobre la preparación de la agricultura para la Tarea Ordenamiento, Gustavo Rodríguez Rollero, ministro del sector, explicó que se ha llevado a cabo un proceso de capacitación, el cual ha llegado hasta el nivel de las cooperativas, y ha contado con la participación de especialistas de varios organismos como el Banco Central de Cuba y el Ministerio de Finanzas y Precios.

Constantemente hemos estado monitoreando las opiniones emitidas en estas reuniones, en las que han participado 12 368 personas de 4 715 cooperativas, de las alrededor de 4 800 existentes en el país, dijo.

En este sentido, señaló que se han recogido 143 planteamientos, tanto dudas e inquietudes como sugerencias, que se encuentran actualmente en proceso de análisis.

Afirmó que han existido inquietudes sobre el tema de los impagos a los productores, el precio elevado de algunos insumos, los márgenes comerciales mayoristas y minoristas de las cooperativas y el régimen de seguridad social en el nuevo escenario.

«Tenemos unas 500 cooperativas con problemas financieros, económicos, y uno de los análisis es cómo vamos a dar tratamiento a esas cooperativas», refirió.

Señaló que ha habido una intensa interacción entre el Ministerio y la Comisión de Implementación, en la que se han debatido diversos temas como la producción de arroz y de café.

Hay una voluntad de atender estos asuntos y de darles respuesta dentro del marco de lo que está aprobado, aseguró.

EN EL SECTOR CAÑERO

Julio Andrés García Pérez, presidente del grupo empresarial azucarero (Azcuba), destacó que la Tarea Ordenamiento constituye una oportunidad y al mismo tiempo un gran reto para los productores y el sistema que los atiende.

«Hay que incrementar la productividad y la eficiencia económica», advirtió.

Quisimos comparar, abundó, en el precio que tuvo la caña en la zafra pasada, que fue 175 pesos en este tramo corto de la zafra que ya comenzamos, en el que hay 31 centrales moliendo, pero el precio en ordenamiento es 449 pesos. Crece 2.56 veces.

«Algunos productores nos han comentado el tema del incremento del precio de los insumos, pero es importante destacar que el margen de utilidad por tonelada de caña se mantiene en 26 pesos. No hay alteración en el margen de utilidad, nuestros productores mantienen el mismo que teníamos», acotó

Por tanto, afirmó que es importante que los productores tengan una apreciación de que en el marco de la Tarea Ordenamiento, resulta imprescindible buscar la eficiencia económica con el incremento del rendimiento agrícola y el uso efectivo de la fuerza de trabajo.

Entre los retos del sector, insistió en la necesidad de potenciar la integración con la ciencia y la innovación, y un grupo de medidas alternativas, que permitan bajar los costos de producción.

«El sistema del nuevo precio de la caña está orientado al incremento de la eficiencia económica, de la productividad del trabajo y del rendimiento agrícola», aseveró.

Publicado Por: Granma

Granma nació el 3 de octubre de 1965, fecha de mucha relevancia para la historia de la Revolución cubana. Granma tiene como objetivo principal promover mediante sus artículos y comentarios la obra de la Revolución y sus principios, las conquistas alcanzadas por nuestro pueblo y la integridad y cohesión de todo nuestro pueblo junto al Partido y a Fidel.

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