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Con la adopción de la resolución ómnibus titulada «Respuesta integral y coordinada a la pandemia por la enfermedad de coronavirus (COVID19)», la Asamblea General de las Naciones Unidas envía un fuerte mensaje a la comunidad internacional sobre la necesidad de la unidad para el enfrentamiento a la pandemia.
Una nota de prensa de la cancillería cubana precisa que la resolución incluye temas como el impacto de la COVID-19 en las capacidades de desarrollo, en particular de los países más vulnerables, y hace un llamado al actuar colectivo para evitar que la pandemia desmonte los éxitos alcanzados por la comunidad internacional en la implementación de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
El texto aprobado enfatiza la importancia de la cooperación internacional y el apoyo financiero de las naciones más desarrolladas, incluyendo a través del alivio de la deuda externa, a los países en desarrollo más afectados.
La resolución también se refiere a la cuestión del impacto de la COVID-19 en el ámbito de los derechos humanos, con particular énfasis en los grupos más vulnerables, entre ellos los pobres, las personas de edad y las personas con padecimientos médicos preexistentes. Se hace un llamado a la comunidad internacional a que los esfuerzos en el enfrentamiento y recuperación de la pandemia aseguren la promoción y protección de los derechos humanos para todos.
Agrega la nota diplomática que Cuba presentó, en nombre de un conjunto de 20 delegaciones, una enmienda que fortaleció aún más el mensaje que traslada esta resolución, al incorporar al texto el llamado al levantamiento de las medidas coercitivas unilaterales contrarias a la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional.
La enmienda constituye un reconocimiento de que los países en desarrollo sobre los que se imponen estas ilegítimas medidas, deben sobreponerse a obstáculos adicionales para enfrentar y recuperarse del impacto de la pandemia de la COVID-19.
El reconocimiento del negativo impacto de las medidas coercitivas unilaterales en los esfuerzos nacionales para abordar la pandemia de la COVID-19 ha sido expresado consistentemente por la mayoría de la comunidad internacional, el Secretario General de las Naciones Unidas, la Alta Comisionada para los Derechos Humanos, así como por numerosos expertos y relatores especiales de las Naciones Unidas.
Numerosas delegaciones, de todas las regiones, expresaron mediante explicación de voto su apoyo a la inserción de la enmienda al texto, destacando la urgente necesidad de la eliminación de las medidas coercitivas unilaterales, denunciando su carácter unilateral ilegal en violación del Derecho Internacional y la Carta de las Naciones Unidas. Se resaltó además como estas medidas obstaculizan e impiden los esfuerzos nacionales y de la comunidad internacional para enfrentar la Pandemia de la COVID-19 y avanzar hacia la recuperación.
