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La selección masculina de Cuba barrió a la de República Checa con parciales de 25-22, 25-18 y 25-18 para avanzar a la final de la Copa Challenger de Voleibol 2022, con escenario en el Gimnasio de Estudiantes de Jamsil, en Seul, Sudcorea.
El duelo por el primer lugar, que al ganador le abrirá las puertas a la Liga de Naciones de Voleibol 2023, será este domingo (2:30 de la madrugada en la Isla) frente al conjunto turco que derrotó a Corea del Sur.
En la mejor actuación en su aún corta temporada 2022, los antillanos fueron superiores en la cancha con dos de sus armas tan efectivas como para marcar amplias diferencias en ataque (41-28) y bloqueo (16-5).
El jugador de esquina, Miguel Ángel López y el opuesto Jesús Herrera estuvieron muy certeros al ataque y resultaron los máximos anotadores del choque con 17 puntos (13 A, 3 B, 1 S) y 14 (12-2-0), respectivamente.
Otro con doble dígitos fue el también atacador auxiliar Osniel Mergarejo con 10 (7-2-1), en tanto los centrales dieron su oportuno aporte, en especial Roamy Alonso con 8 unidades por cuatro ataques en igual cantidad de intentos, y Javier Concepción no perdió ocasión para agregar 6 (5-1-0).
El recibo estuvo más seguro, lo que propició concretar con más acierto el complejo uno. El colocador Adrián Goide distribuyó con mayor tacto, a lo que añadió cuatro muros en su tranquilizador desempeño, sin olvidar la colaboración del experimentado líbero Yonder García.
En un renglón de fuerza de los cubanos como el servicio quedaron por debajo de sus rivales (2-3) y cometieron más errores propios (22-16), muchos de ellos al saque, principalmente en el tercer parcial.
El plantel caribeño comenzó desacertado para marchar abajo en el marcador hasta que empataron con el tanto 16 y tras otro abrazo a 18 lograron seguidilla de cuatro por ataques de López y dos consecutivos de Mergarejo más un bloqueo para encaminarse al triunfo parcial.
En el segundo hasta el tanto 20 y descomunal brecha de 12 puntos, el equipo Cuba marcó un paso impresionante. Errores no forzados y la reacción rival provocaron luego solo tres anotaciones de Cuba por 10 de los checos, que pusieron la pizarra 24-18 hasta que selló el triunfo remate de López.
Bien escucharon el reclamo insistente de su entrenador Nicolás Vives “confíen en ustedes, tranquilos, punto a punto” y así fue desde el pitazo cuando arrancaron en punta con un accionar más seguro y organizado.
Si bien fallaron la mayor cantidad de saques, bastó la eficiencia del ataque y un bloqueo de lujo para devolverles aquel revés que le infligieron los checos en la edición de Portugal 2018 (19-25, 22-25, 21-25), quizás ahora sorprendidos por el crecimiento de este equipo cubano.
