“Si me pudieras querer”, “Ay amor” y “Tú me has de querer”, páginas entrañables del pentagrama nacional corresponden a la autoría de Ignacio Villa, nuestro Bola de Nieve, nacido en la otrora villa de Guanabacoa, el 11 de septiembre de 1911. A los ocho años comenzó sus estudios de piano en el Conservatorio Mateu, de su localidad. Más tarde, estuvo en otros centros musicales capitalinos, mientras se preparaba en la Escuela Normal de Maestros de La Habana. Como ejecutante sus inicios se vinculan al cine silente. En 1933, ya en México, acompaña al piano por primera vez a Rita Montaner; es ella, quien aludiendo irónicamente a su tez negra y a la gordura de su cuerpo, lo bautiza como Bola de Nieve, sobrenombre que lo lanzaría a la fama.
