Fuí placebo, me disgustó, y ahora siento orgullo

Una historia de vida de un cubano de hoy, un santiaguero nacido y criado en el campo que siempre está con las buenas causas que no comulga con chismes, ni actos pusilánimes. Es un hombre que siente orgullo de ser parte de la vacuna Abdala.

Publicado Por: Orlando Ocaña Gómez

Periodista, Corresponsal de la emisora Radio Progreso en Santiago de Cuba.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

12 − 6 =