Magda González Grau: la tercera y última temporada de Calendario es de lujo (+Vídeo)

Vuelvo a la carga con la experimentada realizadora y directora Magda González Grau, principal artífice de la teleserie Calendario, verdadera joya del audiovisual cubano, para que nos hable acerca de la tercera y última temporada de dicha teleserie, que ha acaparado la atención e interés no solo de niños, adolescentes y jóvenes, sino también de toda la familia insular.

¿Cómo se estructuró desde la psicología infanto- juvenil la temporada final de Calendario?      

Cuando se hizo la primera temporada no tenía la más mínima idea de que se filmaría una segunda, y mucho menos, una tercera […], pero en cuanto se terminó la segunda, sí se sabía que se debía tener una tercera para cerrar los conflictos que afectan a esas edades privilegiadas del ciclo vital humano: adolescencia y juventud. Desde entonces, se estaba pensando en cómo iban a discurrir los personajes y cómo iba a concluir todo aquel rosario de situaciones problemáticas que enfrentaban en su medio escolar, familiar y social […].

En respuesta a solicitudes que recibimos, fueron incluidos en la trama dos temas polémicos que, hasta ese momento, no se habían tocado: la discapacidad físico-motora y la religión.

¿Cómo se desarrolló el proceso de inserción y adaptación de los nuevos actores que se integraban al elenco artístico de esa teleserie?

Fue, en realidad, muy fácil. Todos, de una u otra manera, conocían muy bien ese audiovisual, habían visto las dos temporadas anteriores, o sea, estaban familiarizados con los conflictos que se tratan en Calendario, y estaban muy contentos por poder formar parte del elenco de la tercera temporada, y eso siempre es positivo. Enseguida los actores, «veteranos» y «bisoños», se mezclaron y el equipo funcionó muy bien desde todo punto de vista. Entre los nuevos que se incorporaron, habría que mencionar, sobre todo al primerísimo actor Patricio Wood, así como a los jóvenes Emmanuel Castillo, Anabel Novo y Rosalí Suen, quienes fueron calurosamente acogidos en el seno del grupo.

¿Cuáles fueron las principales situaciones problemáticas que enfrentaron los estudiantes del duodécimo3 en el aula, así como en sus respectivos hogares?

En realidad, todas fueron más o menos esbozadas en la tercera temporada. Había que concluir el escabroso tema de la pedofilia, la homosexualidad (femenina en ese contexto), la prostitución (masculina), entre otros no menos lacerantes. Fue todo un reto dramatúrgico llevarlos a la pequeña pantalla. Había que estar a la altura de la intención argumental que proponía el guion, magistralmente escrito por Amílcar Salatti.    

Desde los puntos de vista conceptual y estético-artístico, ¿cómo se concibió esa tercera temporada?

Ante todo, tengo que decirle que la puesta en escena de la tercera temporada no ha cambiado en lo más mínimo, ¡la que ha cambiado, y mucho, soy yo! He aprendido muchísima psicología infanto-juvenil con la teleserie Calendario. He crecido desde ese «susto» que tenía al asumir la responsabilidad de una obra audiovisual de tan larga duración y tratar de hacerlo con rigor conceptual y estético-artístico […]. Fui aprendiendo de los errores, de lo que, a mi juicio, había salido mal y traté por todos los medios a mi alcance que no saliera nada mal en el cierre definitivo de Calendario […].

¿Algo que desee añadir para que no se le quede nada en el tintero?

Desearía lo mismo que deseábamos cuando se filmó la primera temporada, ya que, por muchos problemas socio-económicos y ético-morales que tengamos en nuestra sociedad, sepamos que todo puede tener solución más tarde o más temprano si hay la intención de ser mejores seres humanos, el escalón más elevado al que todos debemos aspirar.

Por lo tanto, el equipo de realización apostó a un aspecto que nos preocupa: la formación que deben recibir las nuevas generaciones, que vivirán, amarán, crearán y soñarán en este país en un futuro muy cercano. Yo creo que si a ellos les interesó Calendario, si en algún momento vieron algo reflejado en la teleserie que tenía que ver con sus vidas, y los ayudó a enrumbarse o a escoger el mejor camino, entonces el objetivo fundamental que nos propusimos se cumplió en todas y cada una de sus partes. Por último, decirle que la tercera y última temporada de Calendario es de lujo.       

 

Publicado Por: Jesús Dueñas Becerra

Jesús Dueñas Becerra. Ejerce como colaborador la crítica artístico-literaria y el periodismo cultural en varios medios nacionales de prensa, en especial, en la emisora de la familia cubana: Radio Progreso. Su actividad fundamental es la crítica de danza y cinematográfica, así como las artes escénicas y las artes plásticas.

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