Teatro de fuerza y candor, de la laureada dramaturga Herminia Sánchez Quintana, Premio Nacional de Teatro 2019, es el título del texto, publicado por Ediciones Unión, y prologado por el poeta, crítico teatral y ensayista, Norge Espinosa Mendoza.
La ilustre intelectual cubana es una primerísima actriz, referente obligado no solo para el teatro, sino también para la radio, el cine y la televisión; medios nacionales de comunicación en los que incursionara con éxito de público y de crítica.
Las aventuras escénicas emprendidas por Herminia y su esposo Manolo Tarraza, su compañero en la vida y en el arte, la llevaron a la docencia superior en la capitalina Universidad de las Artes (ISA), donde enseñó los secretos íntimos del arte de la actuación a los jóvenes discípulos, quienes descubrieron en esa maestra única e irrepetible, en el aula y fuera de ella, los valores éticos, ideo-estético-artísticos, culturales, humanos y espirituales que configuran la personalidad de un actor integral, que ella es, sin duda alguna.
Por otra parte, y en respuesta a un llamamiento formulado por la directora Berta Martínez, laboró en Teatro Estudio, donde desempeñó papeles protagónicos y secundarios en obras antológicas de la literatura y la dramaturgia universales, que la convirtieron —por derecho propio— en una intérprete que nunca fue más allá de lo que se esperaba de ella, y capaz de llenar de energía positiva, luz y color el proscenio de cualquier teatro, las ondas hertzianas o el set televisivo o cinematográfico.
Ese libro podría calificarse como una obra de memorias, en la que Herminia relata su vida privada, así como las vivencias y experiencias experimentadas durante su fecunda vida artístico-profesional.
En síntesis, Teatro de fuerza y candor es el legado intelectual y espiritual de Herminia Sánchez Quintana al desarrollo de las artes escénicas insulares y de mucho más allá de nuestras fronteras geográficas.
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