Sábanas blancas ondean en lo alto, desde la inmortalidad se levanta el nombre de Eusebio Leal Spengler, quien este 11 de septiembre cumple ochenta y un años… y hablo en presente porque Leal sigue vivo en su Habana, de esfuerzos y desvelos.
Se inclinan las columnas, se abren los vetustos enrejados y su obra, fecunda las calles que desandaba a diario para salvar lo salvable, preservar el patrimonio de la Patria, mejorar la vida.
Prosa en ristre, enamoraba con verbo elocuente y fluido salido del conocimiento. Vestía de gris, pero con su acción y ejemplo confería color a lo que le rodeaba recobrándolo de la desidia, el tiempo y la inclemencia de la naturaleza.
Para constatar sus méritos están trofeos, medallas, diplomas y reconocimientos de su Cuba y de otras geografías, lauros atesorados durante una provechosa existencia. Para evidenciar su valía… está el agradecimiento eterno de quienes hoy y siempre disfrutaremos su legado.
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