Arroz | 3 | tazas |
Agua | 2 1/2 | tazas |
Aceite | 3 | cucharadas |
Ajo (dientes) | 3 | u |
Raíz de jengibre fresco o seco, rallado | 1 | cucharadita |
Carne de puerco ahumado, jamón, jamonada, butifarra, mariscos, pescados, etc. | 1 | libra |
Huevos cocinados en revoltillo o tortillas finitas | 6 | u |
Salsa China | 3 ó 4 | cucharadas |
Col cruda cortada en hebras finas o frijolitos chinos | 2 | tazas |
Cebollinos bien picaditos | 2 | tazas |
Si va a usar mariscos, pescado o pollo, cocínelos primero y luego córtelos en tiras finas o pedacitos. Lo mismo debe hacer con la carne de puerco, jamón o jamonada, y con los huevos si usted los prepara en forma de tortillas. Lave y limpie bien los frijolitos y cebollinos. Si no tiene frijolitos, puede usar col cruda cortada en hebras y también otros vegetales como pimientos, pepinos, etc. y cortados en tiras.
Caliente el aceite (para esta receta debe ser maíz, maní, girasol, soya, etc., pues no tiene sabor definido y no aceite de oliva, que por tener aroma y sabor característicos, cambia el sabor del arroz frito); sofría los dientes de ajos machacados y cuando se empiecen a ver dorados añada el arroz frío y comience a revolverlo hasta que usted observe que el arroz está caliente. Añádale poco a poco y mientras lo revuelve, todos los ingredientes más o menos en el mismo orden en que aparecen en la receta. Si es posible, la raíz de jengibre se debe rallar directamente sobre el arroz y siempre lo último que se añade son los cebollinos.
Sírvalo caliente acompañado de salsa China adicional para que cada persona pueda añadirle más a su gusto.